martes, 10 de diciembre de 2013


         ELEFANTES    


  

Fuertes, dulces, serenos, amigables, distinguidos, monumentales, viejos, inteligentes, trompudos, tiernos, sentimentales, sabios, sociales, poderosos, graciosos, leales, amorosos, cuidadosos, comprometidos, protectores.
 Cuando pienso en estos bellos animales me salen todas esas características sin ningún problema, fluidas como un chorro de agua clara; ellos son todo eso y mucho más. Ellos pueden enseñarnos la dulzura, el compromiso, la comunicación además del  cuidado de sus crías, de sus viejos, de su manada; enseñarnos la protección y el amor que muchas veces no somos capaces de dar a los nuestros, a los otros  humanos.  Más bien, hacemos gala de un pernicioso instinto de destrucción que los tiene en grave peligro. La codicia y la ignorancia nos han hecho perseguirlos y asesinarlos para robarles el preciado marfil cuyo destino principal es China y en menor escala Tailandia. A pesar de que en enero de 1990, numerosos países alrededor del mundo firmaron una prohibición internacional para el comercio de marfil y que  la población que había sido mermada en gran escala aumentara, en los últimos años, más precisamente entre el 2012 y el 2013 el aumento en la caza de estos monumentales y bellos animales ha sido catastrófico, y el   decomiso de marfil, el mayor de los últimos 25 años: 41 toneladas de enero a noviembre.
Desde inicios del 2012, 32 mil elefantes han sido asesinados por sus colmillos. En China, estos son artísticamente tallados, subastados y vueltos a subastar obteniendo cuantiosas ganancias; el polvo sobrante de las talladuras es, para ellos, un  elixir  tradicional que combate el cáncer, muchos chinos aseguran  que dar una baratija tallada en colmillo de elefante confiere más prestigio. A este ritmo, estos impresionante animales, los más grandes animales terrestres no van a tener muchas oportunidades de sobrevivir.  Ellos, con su gran cerebro, más grande que el de las ballenas, de los delfines,  del de los caballos, de los perros y por supuesto, más grande que el nuestro están a merced del hombre ambicioso, ignorante, malévolo que junto a la deforestación, son sus peores enemigos.   

Deberíamos detenernos y aprender de estos
“elefántidos-proboscídeos” (de grande y gruesa trompa).
 Tienen un increíble sentido de familia, de la muerte, de la amistad, de la lealtad. Parecen saber lo que es un cadáver de su especie y  tratarlo con respeto. Pueden reconocer y llorar los restos mortales de un familiar, tienen una memoria que llega a superar la nuestra y son capaces de arriesgar sus vidas por el bien de los demás de su grupo familiar. Impresionante, ¡no les parece!.
Protejámoslos… y desde lejos, al menos no compremos productos de marfil, no seamos parte del asesinato contra estos gentiles animales.




Ana Álvarez R.

43 comentarios:

  1. "Parecen saber lo que es un cadáver de su especie y tratarlo con respeto."

    Que me traigan elefantes para morirme entre ellos...

    Saludos, Ana, que bien le ha quedado esta entrada.

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    1. Gracias DW...y los elefantes se los traeré, pero todavía no, todavía no es tiempo de morirse.

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  2. Un bello comentario, Anita, te dejo aquí una excelente reflexión.
    Debemos ser como los elefantes …

    Con pies grandes y pesados… Para tenerlos bien fijos en la tierra y no elevarnos.
    Con orejas grandes… Para aprender a oír y no actuar a ciegas.
    Con boca chica… Para no andar parafraseando, ni hablando de más.
    Con colmillo largo… Para saber actuar en momentos difíciles.
    Tener piel áspera y dura… Para aguantar los embates de los demás.
    Tener cola corta… Para que nadie, por más que quiera, pueda hablar de ti.
    Tener su memoria… Para que nunca olvides quién realmente eres.

    Y como el elefante, que cuando sabe que va a morir regresa a su lugar de origen, igualmente tú, cuando sientas que haz caído en lo más profundo, que no puedes salir y no encuentras ni un rayo de luz dentro del laberinto en que estás inmerso, que lo has perdido todo y no te queda nada, regresa a tu lugar de origen, regresa a tu naturaleza, regresa a ser tú nuevamente, porque tal vez, ¡por la falta de memoria olvidaste quién realmente eres!

    Aurelio Atayde Guizar
    elente reflexión.

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    1. Antonieta, ¡qué sabio!, lo tendré siempre cerca para nunca olvidarlo, gracias.

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    1. María Nela, que bonito verla por aquí, gracias por pasar, saludos.

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  4. Elefantes en manada le quiero echar milindaAna a ese........ de Hattori Hanzo.
    Milinda... ¿Ya viste el blog El sartén caliente? Andá y le tirás todos los elefantes de tu blog AnitaMilinda. Es

    http://sartencaliente.blogspot.com/2013/12/esta-es-una-despedida.html

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    1. Si Niña, ya pasé y he quedado pasmada, pero yo sé que si ud se lo pide, talvez no haya necesidad de mandarle los elefantes

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  5. Estoy de rabietas como una elefanta a la que le roban un bebé elefantito.

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  6. Es una pena lo que el hombre le hace no solo a los elefantes, si no al mundo entero, me pregunto que hará al final cuando todo se agote y solo tenga dinero en sus manos pero no exista que comprar ?

    Cada grano de arena es importante en una playa, en los que tenemos conciencia esta el no promover ese mercado.

    Gracias Ana por su nota !

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  7. Efrain, por favor, sigamos con esto, no claudiquemos nunca. Hay que repetirlo hasta el agotamiento. Gracias por su comentario.

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  8. Marta Carolina Rizo Vivas11 de diciembre de 2013, 9:50

    Muy bello Ana. En mi infancia siempre tuve o una pequeña figura o un avalorio de elefante, porque me parecen tan tiernos y después de ver Dumbo, de Walt Disney, ( plena de antropomosfirmos), pues quedé traumada y enamorada a la vez. Lo que, a veces, también nos pasa en la vida real entre los humanos. En tiempos de Alejandro el Grande, se les aprovechó de forma perversa también, al igual que se les idolatro. Estos dobles discursos y ambivalencias están más presentes cuando el ser humano ignora que ignora que es una parte del todo, del universo en interdependencia, así eliminar se le hace menos culpógeno.
    También recuerdo los atributos que desde la ciencia se les reconoce como su capacidad de memoria, el cuidado en la manada para los más pequeños, el apego del infante paquidermo a su madre y el regresar al lugar específico para morir cuando su desceso no es provocado por el ser humano. y, no creo que se trate de
    Hoy, aparte de mi canción favorita de la banda inglesa, Cold Play y su video Paradaise, leerte me hizo pensar mucho en lo que para mi puede ser resumido en la figura de Mandela, (un hermoso elefante) que la violencia se termine y que otros como Mandela nazcan y vivan muchos años. Gracias por lo que compartes. Abrazos para vos y tu gente en este blog.

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  9. ¡Hola Ana!
    Que pena da comprobar que a estas alturas de siglo todavia tengamos que gritar un no rotundo a la caza y exterminio de especies animales.
    El elefante, el mamifero más grande sobre la tierra, está en peligro por el trafico de marfil...es increíble. ¿Puede haber quién disfrute con la posesión de un colmillo tallado?¿quién crea que el polvo de un colmillo pueda sanarle? a la vista está que si que hay...la demanda lleva a la oferta.
    Me gustaria que un dia escribieras un post anunciando que ni un solo elefante ha sido asesinado ni amputado, cómo decia Gandhi...La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados por la manera en que ellos tratan a sus animales.
    La moralidad...he ahi el quid de la cuestión.
    Besotes y muchas gracias también por tu amable visita, siempre es un placer recibir tus comentarios♥

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    1. Mercedes, has dicho con palabras correctas mi sueño, escribir que hemos crecido como seres humanos, que nos hemos engrandecido de corazón, de alma....gracias por pasar querida Mercedes

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  10. Ana, desde el inicio de tus comentarios sobre este tema en donde comparas a este animal tan majestuoso con criterios y realidades ligadas a la belleza, fuerza, pero también en contraposición a su no menos, lealtad, dulzura y calidez, vinieron a mi mente comparaciones similares. La primera el relato Colinas como elefantes blancos (Ernest Hemingway), narrativa de dos personajes, en una estación del Valle del Ebro, mientras beben y esperan la llegada del expreso hacia Madrid. Jig (uno de los personajes) está embarazada y el otro insiste para que aborte.
    Las colinas como elefantes blancos muestran el vientre de Jig embarazada. El elefante blanco es una criatura extraña, sagrada. Para Jig el no nacido es un elefante blanco, que también puede interpretarse como algo inútil o indeseado.
    Colinas blancas, redondas, como elefantes. La madre de Buda soñó con un elefante blanco como símbolo de pureza y conocimiento, pero para la tradición americana el elefante blanco es una posesión extraña, una carga financiera, con un valor dudoso o indeseado por el propietario. En la época de escritura del relato, el aborto era ilegal y en la mayoría de lugares imposible de practicar, por muy sencillo que diga el norteamericano que es.

    Tambien me recuerda un poema de un autor desconocido:

    Un elefante muy enamorado
    su corazón noble agiganta
    para dar su amor sagrado
    a su querida y bella elefanta.

    Ese enamorado elefante
    rompiendo todos los esquemas
    le trajo a su amor delirante
    una flor de lo más tierna.

    No se sabe si el elefante es africano
    o por el contrario si asiático es,
    solo se sabe que está enamorado
    y que quiere casarse de una vez.
    Al ver a ese elefante amoroso y tierno
    finalmente he comprendido,
    que también a los paquidermos
    les llega la flecha de Cupido.
    Aprovecho para desearte una feliz navidad,
    Marco Carballo



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    1. Muchas Gracias Marco, Buscaré Colinas como elefantes blancos y esa poesía, que hermosa, gracias de nuevo

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  11. ¡Un elefante se balanceaba sobre la tela de una araña...!

    Ana... es que quiero mis elefantes ahora...

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  12. Los elefantes son ejemplarmente solidarios, por eso los odian los reyes que los andan cazando, los reyes que son ahora parásitos sociales.

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    1. Descarados, vagos, parásitos, inútiles, vividores, chupadores, sinvergüenzas...mejor .no me toque este tema DW que pierdo la compostura

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  13. En un documental de NatGeo se expuso, el paralelismo entre la conducta de algunos elefantes que en forma desusual estaban atacando poblaciones y la conducta de los pandilleros de El Salvador, que habían residido o residían en Los Angeles. Estos elefantes, de jóvenes habían sido desarraigados de su hábitat para trasladarlos a otras regiones, e incluso habían presenciado la muerte de los elefantes adultos, a los mataron por lo costoso que significaba moverlos. Los jóvenes pandilleros igualmente presenciaron actos de desarraigo y hechos de sangre. Concluye el estudio que estas vivencias de desarraigo y maltrato quedan impresos en la memoria de estos grupos, los cuales posteriormente ejecutan actos de agresión. Estos mamíferos son imponentes y logran realmente sorprendernos. Aquí te dejo mi aporte querida amiga Anita y me declaro seguidora de tu blog.

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    1. Lucrecia, muy interesante tu aporte. La violencia, a cualquier nivel, provoca siempre más violencia y muchísimo dolor, no debería ser así nunca, deberíamos protegernos los unos a los otros incluidos los animales.
      Saludos

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  14. Hola Ana:

    Leyendo tus reflexiones sobre los elefantes, se me viene a la mente la situación con el maltrato a los perros. Me entristece mucho lo de los elefantes y, definitivamente, no compraría marfil para enriquecer a quienes han hecho sufrir a estos pobres animales; pero creo que también tu reflexión sirve para sensibilizar sobre una situación de la que sí somos testigos en nuestra "casa", a plena luz del día...

    Tanto los elefantes, como los perros, son seres vivos que merecen cariño y respeto. Y, con el caso de los perros, sí podemos ponernos manos a la obra: enseñando a las nuevas generaciones a quererlos, a cuidarlos, a no tirarlos a la calle y, sobre todo, evitando la sobrepoblación.

    Un abrazo y gracias por tu visita a mi submarino.

    Katmarce--
    submarinopimienta.blogspot.com

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    1. Totalmente de acuerdo con usted, a los perros los tenemos cerca. Hay que concientizar a las personas sobre las campañas de castración, de adopción, de ayuda a todo nivel. Gracias Kat por tu aporte, al menos yo no lo había pensado tan claramente.

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  15. Anita que dificil hacer un comentario que no sea en contra de esta cruel matanza de animales, de todos en general, también es de todos conocido que los adornos de mas de una sala en nuestras casas, no en la mía, son de marfil, esto ha sido de siempre, cómo eliminarlo, no siendo topador de este tipo de delincuentes, a veces creo y tal vez no estoy equivocado, que el animal mas peligroso sin duda es el hombre, que es el animal que piensa para hacer daño a todos los animales y en cuenta a Él mismo, me gusto lo escrito y duele pero...desgraciadamente seguirá.

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    1. Gracias Gonzalo, y tiene razón, somos dañinos como el que más, que pena










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  16. Ana Lorena Hernández11 de diciembre de 2013, 22:22


    Me encanto, me puso a reflexionar lo que es la vida y todos esos detalles hermosos y valiosos que en ocasiones dejamos de lado por cosas materiales, que al final no nos llenan. Y claro que también en esos hermosos seres que yo siempre he admirado!!! .
    Muchas gracias por compartirlo

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    1. Gracias None por pasar, leer y compartir con nosotros tu sentir, saludos

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  17. Hola Ana, muy linda tu entrada. Triste leer la barbarie. Sería maravilloso que los humanos desarrolláramos esas cualidades tan especiales. Un saludo, que goces de una linda tarde.

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    1. Eso sería lo ideal Vanessa, gracias por pasar y dejar su sentir, saludos

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  18. Con su permiso y el de sus elefantes:

    AL FIN, LLEGA AL CINE MAGALY LA PELÍCULA "2001: ODISEA DEL ESPACIO"
    Cineforo del Club Magaly dentro del ciclo: "Ciencia-ficción: Odisea del cine"
    presentan los críticos de cine Wílliam Venegas y Yoshua Oviedo.

    Sábado 14 de diciembre, 2013,
    1 p.m. ¢2.300 el boleto

    2001: Odisea del espacio
    EE.UU. – UK; 2001: A Space Odyssey, 1968
    Director: Stanley Kubrick
    Con Keir Dullea, Gary Lockwood, William Sylvester
    160 minutos

    La película de ciencia-ficción por excelencia de la historia del cine narra los diversos periodos de la historia de la humanidad, no sólo del pasado, sino también del futuro.

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  19. Terminando de leer tu relato me acordé de una parábola sobre estos grandiosos animales y en especial la similitud de cómo en muchas ocaciones somos víctimas de nuestro pasado. Aquí te lo dejo para su reflexión...
    Cuando yo era pequeño me encantaban los circos y lo que más me gustaba de ellos eran los animales. Me llamaba especialmente la atención el elefante que como más tarde supe era también el animal preferido de otros niños. Durante la función, la enorme bestia hacía gala de un tamaño, un peso y una fuerza descomunales...Pero después de la actuación y hasta poco antes de volver al escenario, el elefante siempre permanecía atado a una pequeña estaca clavada en el suelo con una cadena que aprisionaba sus patas.
    Sin embargo, la estaca era sólo un minúsculo pedazo de madera apenas enterrado unos centímetros en el suelo. Y aunque la madera era gruesa y poderosa, me parecía obvio que un animal capaz de arrancar un árbol de cuajo con su fuerza, podría liberarse con facilidad de la estaca y huir.
    El misterio sigue pareciéndome evidente.
    ¿Qué lo sujeta entonces?, ¿Por qué no huye?.
    Cuando era niño,yo todavía confiaba en la sabiduría de los mayores. Pregunté entonces por el misterio del elefante...Alguno de ellos me explicó que el elefante no huía porque estaba amaestrado.
    Hice entonces la pregunta obvia: "Si está amaestrado, ¿por qué lo encadenan?".
    No recuerdo haber recibido ninguna respuesta coherente. Con el tiempo,me olvidé del misterio del elefante y la estaca...
    Hace algunos años descubrí que, por suerte para mí, alguien había sido lo suficientemente sabio como para encontrar la respuesta: "El elefante del circo no escapa porque ha estado atado a una estaca parecida desde que era muy, muy pequeño".
    Cerré los ojos e imaginé al indefenso elefante recién nacido sujeto a la estaca. Estoy seguro de que en aquel momento el elefantito empujó, tiró y sudó tratando de soltarse. Y,a pesar de sus esfuerzos, no lo consiguió, porque aquella estaca era demasiado dura para él.
    Imaginé que se dormía agotado y al día siguiente lo volvía a intentar y al otro día y al otro...Hasta que un día, terrible para su historia, el animal aceptó su impotencia y se resignó a su destino. Ese elefante enorme y poderoso que vemos en el circo no escapa, porque, el pobre, cree que no puede.
    Tiene grabado el recuerdo de la impotencia que sintió poco después de nacer. Y lo peor es que jamás se ha vuelto a cuestionar seriamente ese recuerdo. Jamás, jamás intentó volver a poner a prueba su fuerza.
    Todos somos un poco como el elefante del circo; vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos restan libertad.
    Vivimos pensando que "no podemos" hacer montones de cosas,simplemente porque una vez,hace tiempo lo intentamos y no lo conseguimos. Hicimos entonces lo mismo que el elefante y grabamos en nuestra memoria este mensaje: No puedo, no puedo y nunca podré.
    Hemos crecido llevando este mensaje que nos impusimos a nosotros mismos y por eso nunca más volvimos a intentar liberarnos de la estaca.
    Cuando, a veces, sentimos los grilletes y hacemos sonar las cadenas,miramos de reojo la estaca y pensamos:"No puedo y nunca podré".
    Ésto es lo que te pasa, vives condicionado por el recuerdo de una persona que ya no existe en tí, que no pudo.

    Tu única manera de saber si puedes es intentarlo de nuevo poniendo en ello todo tu corazón...¡¡¡Todo tu corazón!!!.

    JORGE BUCAY.

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  20. ¡Mundo de locos!
    ¡Cuánto tendríamos que aprender de los animales, ya sean elefantes o mosquitos!
    Un saludo,

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  21. Gracias Aprendiz de Brujo, mucha razón guardan sus palabras..

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  22. Ana, mágnifico post. Admiro y respeto a los animales. No solo a los elefantes, hay muchos que demuestran una sensibilidad por la vida mucho más profunda que algunos humanos que he conocido.

    Gracias por tu sentir,
    Jacob

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  23. Jacob, gracias a usted y estoy de acuerdo, yo también he conocido a "esos" humanos. Un abrazo cálido para ud

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  24. Ana esta entrada es realmente conmovedora. Cómo duele ver la extinción de las especies animales. Un animal tan fuerte y hermoso como el elefante el hombre lo destruye sin compasión extinguiendo la especie; entre uno de sus propósitos para obtener grandes ganancias en el mercado con la venta de marfil o por deporte (cacería).

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  25. Hay un punto que considero importante mencionar. He leído que en algunos circos hay maltrato al elefante cuando se les entrena y obviamente a todos los animales que tienen bajo su dominio. Creo que en este tipo de espectáculos los animales sufren mucha agresión, la primera es privarlos de su hábitat y otra la forma en que son adiestrados.

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  26. El hombre se ha deshumanizado tanto que desde hace mucho tiempo se empeñó en destruirse a sí mismo y a la naturaleza. Hoy podemos ver las consecuencias de tan irracional proceder. ¿Qué le podemos entregar a las futuras generaciones?. Un planeta que muere día a día por la irresponsabilidad, ignorancia y prepotencia de la humanidad.

    Un abrazo. Carmen Fernández R.

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  27. Gracias Carmen por sus valiosos aportes, estoy de acuerdo con ud en todo, saludos

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Se les agradece sus comentarios, son parte de mi SENTIR...